EN QUE CONSISTE LA PSICOTERAPIA INFANTIL

Durante la infancia y en muy breves lapsos de tiempo, los niños han de realizar grandes progresos y, para lograrlo necesitan identificarse con los adultos y establecer un buen vínculo  para que les ayuden a ir forjando su personalidad y esto tiene más que ver con la calidad del tiempo que se les dedica que con la cantidad. De esta forma, serán capaces de ir construyendo sobre una base sólida y de confianza que les pueda llevar desde la indefensión del principio hasta la autonomía e independencia sanas.

La salud física y psicológica tiene que ver con muchos factores y en ocasiones su equilibrio es frágil, inclusive en la infancia. Manifestaciones que a una edad son un trastorno en edades anteriores implican un funcionamiento normal. La evolución en el desarrollo infantil es un cambio constante de desajustes y reajustes. Por lo que hay que diferenciar entre dificultades que puedan ser pasajeras y aquellas que implican una señal de alarma y valorar si es necesario consultar (ver cuándo consultar)

El trabajo de psicoterapia infantil no iría únicamente dirigido a suprimir el síntoma. La tarea se dirigiría a la comprensión de lo que el niño/a está expresando con ese síntoma, a las posibles ansiedades subyacentes, fantasías, creencias, estimulando la comunicación y en el caso de los niños, dada su dificultad de comunicarse sólo a través de la palabra, se ofrecerían otros medios para poder expresarse como son el juego y el dibujo. Mediante estos recursos terapéuticos el profesional ayudaría a elaborar, tolerar y seguir evolucionando y progresando.

El tratamiento incluye también ayudar a la familia a elaborar las experiencias que vive el grupo familiar a lo largo de las diferentes etapas potenciando relaciones interpersonales que estimulen el progreso. A la tarea con el niño y la familia se pueden añadir también trabajo con el medio escolar y social del niño como elementos que también pueden potenciar el desarrollo.

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